Conociendo a Sol Ceballos, jugadora del Itea Córdoba
El Itea Córdoba está siendo uno de los grandes protagonistas en este inicio de competición en el Grupo D de la División de Honor Plata Femenina. Allí milita Sol Ceballos, jugadora argentina que dio el salto a España con el objetivo y la ambición de crecer en este deporte, y lo ha logrado.
En Time Sport hemos tenido el privilegio de charlar con ella, de conocerla un poco más y de descubrir qué significa para ella este deporte. A continuación, la entrevista al completo.
¿Cómo está siendo esta etapa en Itea Córdoba?
“La verdad es que esta etapa está yendo muy bien, mejor de lo que me esperaba. Me integré muy bien en el equipo y me encanta el sitio. La verdad es que va todo súper bien. Poco a poco nos vamos encontrando y creando una identidad”.
En Argentina, tu país natal, te iniciaste en el balonmano y luego diste el salto aquí a España para continuar tu carrera. ¿Cómo fue ese cambio y la toma de esa decisión?
“Cómo bien dices, yo comencé en Argentina y me vine aquí en 2014 porque quería dar ese salto profesional. Al final yo soy una jugadora que nunca estuve en la selección, y me apetecía. Sabía que por esa puerta nunca hubiera podido irme fuera, entonces tendría que ser una iniciativa mía. Pensé que me tenía que ir, probar suerte y ver qué pasa”.
“Sinceramente, no tenía nada hablado. Terminé allá mi etapa, con 18 años, y había terminado la escuela y todo. Estaba en el último año, porque justo yo terminaba y comenzaba la categoría junior. Generalmente, en Argentina, en esa etapa la gente ya comienza la Universidad y todo, y era para mí el momento perfecto para terminar una etapa y empezar otra. Mi papá vivía acá, y pensé en irme a España a probar suerte”.
“Justo cerca de la casa de mi papá estaba el Club Alcobendas. Fuimos a hablar con ellos y me fui a probar. Llegué en enero de 2014, empecé a jugar en Primera Nacional y en junio comencé a jugar en División de Honor. Decidieron subirme al primer equipo porque les gusté, y ahí digamos que empecé mi carrera profesional”.
“Fue un salto muy grande al principio. No tiene nada que ver una estructura con la otra. Un cambio enorme, tuve que adaptarme a muchísimas cosas, mejorar muchísimo. Pero poco a poco uno se va acomodando, y yo creo que con trabajo y esfuerzo uno consigue siempre lo que quiere”.
¿Y cómo fue la experiencia de jugar en la máxima categoría del balonmano español?
“Para mí fue increíble, porque no estaba en mis planes. Yo vine aquí a jugar y de repente que te digan que te van a subir al primer equipo y darte cuenta que estás ahí, haciendo la pretemporada con jugadoras que en ese momento estaban en Alcobendas, como Silvia Arderíus que va a jugar el Mundial, o demás compañeras, fue un sueño que pude cumplir”.
¿Qué significa el balonmano para ti, y cómo valorarías tu trayectoria hasta la fecha?
“Para mí el balonmano es mi vida. Yo siempre lo remarco así porque desde que empecé a jugar a los 8 años, mi mundo, mi entorno…, todo giraba en torno al balonmano. Adapté mi vida a ello”.
“Creo que desde chiquitita era ya profesional sin saberlo. A veces, como dice muchas veces mi pareja, uno no necesita un sueldo para ser profesional. Uno es profesional desde lo que come hasta fuera del balonmano. Yo creo que era profesional sin saberlo. A los 8 años era súper seria, cumplía un montón a la hora de trabajar. Si había que faltar a cumpleaños o fiestas porque a otro día jugaba, lo hacía”.
“Para mí es mi vida, y a día de hoy lo sigue siendo. Yo creo que el balonmano, básicamente, todas las experiencias que me ha dado me han hecho una persona más fuerte. Nada fue fácil para mí en este camino de aprendizaje. Todo me costó mucho, desde mis primeros minutos hasta llegar a jugar en División de Honor. No me dieron nada regalado, todo fue a base de sacrificio y esfuerzo. Eso para mí es muy importante”.
¿Cuáles son los objetivos que tiene marcados Sol Ceballos a día de hoy en el balonmano?
“Ahora mismo, con mi actual club, clasificar a la fase de ascenso. Creo que es un objetivo bastante realista y cercano. Me quiero plantear eso de cara a este año”.
“Más adelante, en un futuro, llegar a la selección argentina. Es otro de los objetivos que tengo”.
¿Qué consejo le darías a todas esas jóvenes jugadoras que sueñan con llegar alto en el balonmano y conseguir una trayectoria, por ejemplo, como la tuya?
“Yo lo que les recomiendo es que, independientemente de lo que pase afuera y de los minutos que jueguen, que trabajen. Sea cual sea su objetivo, que trabajen duro. Cuando uno trabaja, realmente los sueños se cumplen”.
“Es muy importante trabajar y dar el máximo. Como dijo un entrenador mío, hay que dar no el 100%, sino el 200%. Así cuando uno está un poco más bajo de energía, da el 100%”.
Para acabar, y para que la gente te pueda conocer un poco más, ¿qué hace Sol fuera del balonmano? ¿Qué aficiones tienes, etc.?
“Me encanta leer. Tengo los estudios de ATV, Auxiliar Técnico Veterinario. Ahora mismo no estoy ejerciendo porque terminé el año pasado las prácticas, y estoy intentando a ver si sale algo. Es complicado, por el tema de compaginar el trabajo con el balonmano”.
“Estoy también estudiando inglés e intentando sacarme el carné de conducir, que ya toca”.
Foto: Marga TR